¿No sabes qué academia de inglés escoger? En esta guía, te contamos todo lo que debes saber para elegir tu academia de inglés con facilidad.
Aprender inglés es uno de los principales objetivos que una importante parte de los adultos españoles tienen en su lista de “tareas pendientes”. La realidad demuestra que, cada vez, son más las empresas que solicitan personal, cualificado o no, con cierto dominio de inglés, que varía según el puesto y las funciones a desempeñar.
Sin embargo, obtener un puesto de trabajo no es el único motivo por el que las personas se lanzan, ya en edad adulta, a mejorar, o aprender, este idioma. Motivos personales, como emprender un viaje por extranjero o la auto-superación, son otras de las razones para comenzar esta andadura.
Seleccionar un centro formativo donde alcanzar este reto no es tarea fácil, pues existe una gran diversidad de ofertas entre las que elegir. Academias, centros, escuelas, colegios o institutos de idiomas son algunas de las opciones que tienes para emprender tu aventura formativa. La pregunta es ¿qué centro elegir? ¿Qué criterios tener en cuenta para seleccionar un buen centro de inglés y acertar?
Criterios a considerar para elegir tu academia de inglés.
La amplia oferta educativa hace que cada vez sea más complicado elegir un centro y acertar en la decisión. Guiarte por un solo criterio, como puede ser el precio, el horario o la ubicación no es aconsejable, aunque puede que a veces no te quede más remedio.
Está claro que la ubicación y el horario son dos factores importantes. A veces no te queda más remedio que elegir el centro que más cerca de tu hogar o trabajo se encuentre (aunque a veces desplazarse un poquito más merece la pena si te van a formar mejor), o aquel que te ofrece el horario que mejor se adapta a tus necesidades. Sin embargo, siempre que puedas elegir entre varios, es aconsejable que, antes de tomar tu decisión, tengas en cuenta los siguientes criterios:
- El profesorado. Es el elemento clave a la hora de elegir tu centro. De los profesores, de su dedicación, amabilidad, paciencia, motivación e interés, dependerá tu propio interés, tu motivación y tu capacidad para esforzarte y aprender, además de tu futuro nivel de inglés. Certifica que se trata de personal cualificado, que cuenta con cierta experiencia formativa. Que los profesores sean nativos o no, en niveles bajos y medios no es tan importante, sino que sean bilingües y sepan enseñar.
- La ratio profesor –alumno. Una pregunta obligatoria cuando estés analizando tus opciones y estudiando los centros, es cuántos alumnos hay en cada grupo. Cuantos más alumnos tenga un profesor, menos tiempo podrá dedicarte. Lo ideal es elegir un centro con una ratio pequeña, de un profesor para cada 10 ó 12 alumnos como máximo.
- La metodología. La metodología es la forma en la que los profesores imparten las clases, es decir, el método y las técnicas que utiliza. Existen diversos tipos de métodos de enseñanza- aprendizaje, unos más dinámicos y participativos que otros. Lo ideal es que se alternen clases teóricas, en las que te enseñen gramática inglesa, con otras sesiones más prácticas y lúdicas, en las que practicar conversaciones, llevar a cabo debates, ver grabaciones, aprender canciones o realizar juegos en inglés. El uso de ordenadores, proyectores, altavoces, etc en el aula también ayuda mucho. Que haya uniformidad en la metodología de la academia te permitirá poder cambiar de grupo sin problemas si fuera necesario.
- Servicios extra. Otro punto a favor de la academia es si te ofrece otros servicios complementarios que puedan ser de tu interés. Muchas academias, además de los tradicionales cursos de idiomas, disponen de otros servicios complementarios como atención telefónica, tutorías, contenidos extra, actividades extraescolares, cursos en el extranjero o programas de práctica, trabajo o voluntariado, matriculación a exámenes… con los que completar y perfeccionar tu formación.
- Las instalaciones. Por supuesto, el espacio y la decoración también es importante. Todo el mundo se encuentra más cómodo, y se centra mucho mejor, en un espacio amplio, limpio, cuidado, bonito, en el que cuentas con mobiliario en buen estado y confortable. A todas las personas les atrae más los centros nuevos, bien decorados, que cuentan con recursos y materiales tecnológicos de última generación. Sin embargo, este criterio sólo deberías tenerlo en cuenta para decidirte entre dos opciones iguales, para desempatar, y no ser considerado como un criterio clave.
- El precio. El precio es un factor importante, sin embargo, no debería ser el único criterio a considerar. Recuerda que, en ocasiones, lo barato sale caro. Puede que te estés ahorrando algunos euros y estés perdiendo calidad. Además, ahora la mayoría de las academias lanzan ofertas diversas de las que te puedes aprovechar. Los precios deben estar listados por ley a la vista en la academia.
- La calidad. Es difícil valorar la calidad de un centro cuando no estás dentro, sin embargo, existen indicadores que te pueden ayudar a averiguar si el centro imparte una formación de calidad. Entre estos indicadores, además de la opinión de sus alumnos, principal referente que puedes conocer a través de las redes sociales, se encuentran también las acreditaciones que posea el centro, que certifican su calidad en lo que respecta a la enseñanza.
- Posibilidad de combinar clases presenciales con formación a distancia/online.
- Disponer de un método blended-learning puede ser un punto a favor. Esto te permite abaratar costes, ya que vas a la academia solo a escuchar las indicaciones del profesor y realizar los ejercicios que necesitan guía. El resto del temario lo trabajas en casa, y así ahorras tiempo en desplazamientos.
- Su especialización. Revisa cuál es el punto fuerte de tu academia: la preparación de exámenes, inglés para negocios, etc.
- Leer recomendaciones de alumnos anteriores te ayudará mucho a decidir.
- Estudiar con alumnos de tu misma edad también ayuda a que el aprendizaje sea más fluido y a forjar relaciones para estudiar juntos.
- Satisfacción y flexibilidad: Posibilidad de reembolso si no te gusta el curso, o de parar tu curso, aplazarlo o cambiarlo de horario una vez abonado. Poder ver grabadas las clases que te has perdido o recuperlas te ayudará también a amortizar tu inversión.
- Combinar diferentes opciones formativas: clases en grupo, particulares, online, etc. suele ser muy útil en algunos casos donde el inglés se nos atraganta un poco.
- Itinerario formativo. Saber de dónde vienes (que te hagan prueba de nivel antes de empezar) y a dónde vas (fijar unos objetivos en un plazo de tiempo determinado). Es decir, no estudiar inglés año tras año sin ningún propósito claro.
Esperamos que revisar esta lista te ayude a acertar en la elección de la academia que más se ajusta a tus necesidades.
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